SEÑALES

-No me importa mucho el sitio... -dijo Alicia.

-Entonces tampoco importa mucho el camino que tomes - dijo el Gato.

"Algunos pensamos que lo que nos hace más fuertes es aguantar, pero otra veces es dejarlo estar". Herman Hesse

Estaba un hombre en mitad del océano en una balsa. En medio del tremendo oleaje marítimo la balsa se hundió y el hombre quedó a la deriva. No tenía salida: comenzó a rezar y a pedir al Altísimo que le sacara de ésa. En su corazón recibió una respuesta: la seguridad de que Dios le rescataría.

Pasó por su lado un barco pesquero que le invitó a subir, pero el hombre replicó:

-No, yo confío en Dios, y sé que él me salvará.

El hombre no subió, pero al rato pasó por su lado un helicóptero de vigilancia marítima, que le invitó a subir por las escaleras de salvamento.

-No, yo confío en mi Dios, y sé que él será mi salvador.

Pasaron las horas, los días, y nunca más se supo de aquel hombre.

Cuando éste llegó a su juicio, allí en la antesala del cielo se encuentro con Dios y le preguntó contrariado:

-Señor, yo confiaba en ti, en que tú me salvarías.

-Te dí una balsa y la hundiste, te mandé un barco pesquero a tu ayuda y lo rechazaste, y te mandé un helicóptero de salvamento y no subiste. ¿Qué esperabas?

Dios, la Vida, el Universo, el Destino o en lo que sea que creas; sabe que tenemos problemas

y como estamos de dudosos, desidiosos por tomar una decisión porque a pesar de que sabemos que no está bien lo que estamos haciendo y que no queremos tomar nosotros alguna decisión por que sabemos que nos va a doler queremos que nos lo confirme algo “Divino”. ¿A qué me refiero con esto? A las <<Señales>>.

La semana pasada saliendo de mi clase de Yoga pude entender de una manera muy clara que Dios, la Vida, el Universo o el Destino; me estaban dando otra oportunidad de encaminar las cosas, ya que pasaron hechos que si hubieran pasado de otra manera se hubiera hecho un tremendo caos y mi vida ahorita sería un total drama. Antes de dormir, siempre pido a Dios para cualquier situación o algo en especifico diciéndole: <<Diosito, gracias por lo que me has dado y por lo que no, te pido por favor que me mandes “tal cosa” como señal de esta “equis situación” o una señal muy clara, pónmela en frente de mis ojos por que sabes que soy muy tonta y no me doy cuenta o no me quiero dar cuenta” Amen.>> En este caso, estaba pidiendo por algo en especifico y ya había estado pidiendo por esto hace 2 meses, la verdad es que creo ya haber visto señales pero como yo pedía algo tan especifico no quería ver que en verdad; Diosito sí me había escuchado.

Ese día en especifico hizo que entendiera por completo esta anécdota o esta reflexión; a veces pedimos tantas veces una segunda oportunidad, una ayuda o una Señal para saber si vamos por buen camino y a veces lo pedimos de manera muy especifica que pensamos que este tipo de señales no existen, cuando en realidad la Vida quiere que aprendamos a captar las señales de diferentes maneras, quiere que pensemos y reflexionemos, que abramos los ojos y que nos demos cuenta de la situación en la que estamos. A veces hace falta salir del problema y ver las cosas desde otro ángulo, para poder ver en qué si hubieran pasado las cosas de otra manera, las cosas serían distintas, quizás no estaríamos aquí o no estarías tan tranquilo como estas.

Si los que me están leyendo no creen en Dios, el Destino o en esa clase de cosas, sólo dense cuenta de que el Universo, el Mundo y la naturaleza lo formamos todos, siempre va a querer que nosotros estemos bien así que te mandará las Señales necesarias para que estés en paz contigo mismo para que así después puedan estar en paz los demás y así los demás también puedan vivir bien. Sólo abre bien los ojos antes de que entres a un tremendo drama y tengas que tocar fondo para salir de eso.